Visitar Mérida es encontrar razones para desear que los días no se acaben. La capital yucateca encierra tradición y cultura, color y música, gastronomía y baile, que se encuentran muy repartidos para que no se viva ni una sola jornada si no es con júbilo. Y por supuesto, todo esto enmarcado en un destino de calles empedradas, de personas sonrientes que saludan al pasar y de la magia de la naturaleza que tienes al alcance de tu mano. Mérida es todo lo que desea e incluso todo lo que aún no imaginas.
Con este ritmo fresco, con su alegre música, con la jarana y sus pasos encantadores que invitan a que el cuerpo desborde de movimientos y se desarme en alegría, los domingos adquieren otro tinte en Mérida. Aquellos que consideran que este día de la semana evoca nostalgia o provoca desgano, no estuvo en Mérida. ¡Conoce «Mérida en Domingo»!
La jornada dominguera se espera con ansias durante la semana. Este día se vive con gran clamor pues la cultura abandona todos los recintos y se apodera de la calle, se extiende por el aire y se contagia a todos. El lugar elegido para llevar a cabo este encuentro, que por cierto ya tiene más de 20 años, es el Centro Histórico. Un lugar que no resulta casual si consideramos que el evento tiene la finalidad de valorizar la identidad yucateca, exhibiendo sus formas de vida, su historia y sus más profundas raíces.
Participar de esta tradición es una excusa para divertirse con la familia o amigos. Durante la misma no se encuentra ni un solo momento libre ya que las propuestas culturales y artísticas son variadas y se viven a pleno, a la par que también hay espacios para disfrutar de la exquisita gastronomía yucateca.
Así, por un lado, están las Vaquerías Regionales, un baile que surgió hace años en las haciendas luego de que se hiciera la marca en el ganado. También eran fiestas que se celebraban en honor de los santos patronos y que podían durar varios días. En la actualidad, recrear las Vaquerías es sin dudas mantener viva esta costumbre que tiene varias influencias, mayas y españolas fundamentalmente. Además, la misma incluye la puesta en escena de una boda mestiza.
La Jarana también acompaña los domingos, con el colorido de los trajes y la picardía de sus “bombas”, que son las rimas que recita el compañero mientras la mujer despliega sus artesas de baile y luce su hermoso huipil. Quienes se animan participan de la Gran Maratón de Baile, que es otro capítulo central del evento dominguero.
¡Los niños no se quedan afuera! Ellos también encontrarán con que divertirse en las cálidas noches yucatecas. El Parque de Las Américas los estará esperando para regalarles risa y diversión, desde las 18 hasta las 20 horas.
Y por último, el Parque de Santa Lucía y el Jardín del Compositor son lugares ideales para conmoverse hasta lo más profundo con el canto de aquellos que llevan la música en el alma y quieren compartirla.
Mérida en Domingo es la forma perfecta de terminar una semana y empezar otra ¡a puro color y ritmo!
