Holbox es una pequeña y acogedora isla de la Península de Yucatán, destino buscado por los viajeros que desean entrar en contacto cara a cara con la naturaleza y dejarse llevar por unos días salvajes. Lo cierto es que este punto mágico del mapa de México resguarda uno de los escenarios naturales más increíbles del continente: con cuarenta y dos kilómetros de largo, la Isla Holbox ofrece 36 kilómetros de playas paradisíacas y una variedad ecosistémica inverosímil que contiene miles de especies animales y vegetales conviviendo en sus hábitats naturales.
Yum Balam, un área natural protegida a orillas de Holbox, fue declarada como tal no hace mucho, apenas diez años, cuando las autoridades de la región comprendieron la importancia de la riqueza natural que esta porción de tierra contenía. Su nombre simboliza la leyenda maya «Señor Jaguar» y se extiende sobre más de ciento cincuenta hectáreas que incluyen parajes preciosos entre los que se cuenta la Isla Holbox. Ésta última constituye sin dudas la puerta de entrada predilecta para ingresar a la zona de Yum Balam y todas sus riquezas, la mejor forma de arribar a ella y explorar paisajes majestuosos que desbordan tesoros.
En Yum Balam las aguas cristalinas del océano se vuelven por momentos transparentes y permiten observar los fondos coloridos, repletos de criaturas submarinas. Santuario de delfines, la zona cuenta con diversos focos especialmente dispuestos para contemplar desde bien cerca, incluso casi tocarlos, a estos mamíferos simpáticos que se desenvuelven en sus hábitats naturales. Junto con los delfines el océano próximo a la Isla Holbox es prolífero en cuanto a una de las criaturas más asombrosas de México: el tiburón ballena. ¡Una aventura increíble te espera por los alrededores!
La zona está compuesta por diversos paisajes y geografías disímiles dentro de las cuales las playas son sólo una. Del otro lado, y a muy pocos pasos de la Isla Holbox, descubrirás escenarios increíbles, humedales y selvas tropicales en las que abundan las especies de flora y fauna autóctonas. Aquí es posible practicar diversas actividades, todo en el marco de respeto que el área protegida impone, desde senderismo, rappel, tirolesa o cabalgatas en medio de caminos escarpados que se adentran en el colorido selvático. Jaguares, pumas, ocelotes y gatos de selva salen al paso de los visitantes y se dejan contemplar desde lejos en todo su esplendor.
Lo cierto es que unas vacaciones por Isla Holbox invitan a vivenciar experiencias únicas que van mucho más allá del descanso bajo el sol y el relax en playas paradisíacas. La aventura en Yum Balam se impone como la mejor forma de explorar parajes insólitos, descubrir la riqueza ecosistémica de la región y tomar conciencia acerca de la importancia en el cuidado del medio ambiente natural.
¿Qué esperas para comprobar por ti mismo este destino soñado? ¡Isla Holbox te espera!
