Isla Holbox es una de las perdiciones del estado de Quintana Roo: con verla desde lejos para los viajeros no es suficiente. Y mucho menos si hacen caso a los rumores que circulan sobre ella: paradisíaca, el lugar perfecto para descansar y con una rutina diaria que transcurre al ritmo de bicicletas, que es el medio de transporte oficial. Así ¿quién quiere perdérsela?
La preferencia de los turistas a la hora de visitar este sitio no sólo está relacionada con la belleza que los aguarda, con naturaleza virgen y playas blancas, sino también por las amplias posibilidades de disfrutar de un día de puro placer, con propuestas capaces de complacer todos los sentidos. Las actividades deportivas no son dejadas de lado pero mucho menos la gastronomía. En este último aspecto, uno de los sitios más tradicionales, el lugar por excelencia al que acuden todos los visitantes en primera instancia es Zarabanda: el restaurante caribeño de Holbox.
Un sitio que ha sabido ganarse su fama gracias a la cálida atención por parte de sus dueños, además de la atmósfera agradable producto de la fusión de dos componentes clave: la informalidad necesaria para relajarse y sentirse a gusto y un entorno que sobresale por lo mágico y lo natural. La decoración del sitio es propia del destino en donde se encuentra: un estilo caribeño y relajado pero muy bien cuidado y pintado de varios colores que acompañan y alegran el lugar.
El menú está planeado no sólo para despertar todo tipo de antojos sino también para superarlos con creces, con platos deliciosos y originales que ofrecen variadas opciones. Así, aquellos amantes de los productos marinos podrán deleitarse tanto como los amantes de las carnes rojas o los vegetarianos. Algunos de los platos recomendados son los filetes de pescado con diferentes salsas o guarniciones, por ejemplo al curry, a la diabla o al mojo criollo, así como pulpo a la mexicana, langosta a la plancha, entre otros. Los que no se pierden la oportunidad de comer carne, no deben omitir las chuletas de cerdo a la mostaza y miel o la arrachera. Asimismo, los vegetarianos podrán degustar ensaladas frescas, recién preparadas, con propuestas originales como el plato tricolor o las que acompañan al “spaghetti frutos de campo”; también hay mix de verduras a la plancha.
El postre o el café son elecciones “unánimes” en donde todos los gustos se encuentran. ¿Qué probar? Las natillas, la espuma de pasión o la tentación de plátano. Por supuesto, las ensaladas de fruta no faltan y mucho menos si el día está caluroso.
Una de las novedades de Zarabanda es que ofrecen tours de pesca para que la propia presa capturada pueda ser parte del menú. Algo que los aficionados al deporte sin dudas eligen pues disfrutan por partida triple: la actividad, los aperitivos y snacks durante la travesía y luego, sus propios “hallazgos” preparados como más les guste.
Y por último, la faceta de bar aporta vibra y diversión en cualquier momento que visites el sitio.
De esta manera, el famoso Zarabanda y la Isla Holbox conforman un plan perfecto para unos días de descanso puro. ¡No te lo pierdas!